sábado, 5 de febrero de 2011

EL AMOR Y LAS EMOCIONES


“El amor es la más fuerte de todas las pasiones, porque afecta al mismo tiempo a la cabeza, corazón y al cuerpo”
Voltaire.

El amor es un fenómeno maravilloso

Se han escrito mas 500 millones de artículos, canciones, poesías y estudios dedicados al amor entre un hombre y una mujer. Es que al amor se le han dado diferentes descripciones como: “El amor es ciego”, “el amor es como una droga”, “cuando estas enamorada(o) sientes cosquillitas en la barriga” etc.

En realidad el proceso del amor, es un fenómeno maravilloso que sucede en el ser humano, primero con una mirada para poner a funcionar al “Cupido” para que venga en nuestra ayuda con su flechazo de amor. Esa primera mirada llena de emoción transmite una serie de sensaciones a través del espacio, generando también un sentimiento y mayor emoción en quien la recibe. Ya estamos utilizando entonces nuestro sistema neurológico y biológico para sentir esa maravillosa y desconocida fuerza del AMOR!

La verdad es que cuando vemos a una mujer enfrente de nosotros decimos: “esa chica o esa mujer esta divina”, “me gusta”, “me agrada” diría un hombre, como también “ese hombre se ve tan guapo”, “mira qué hermoso es”, “tiene unos ojos lindos” sería la primera expresión de esa chica que ha quedado impactada en ese primer encuentro visual. Durante todo ese trayecto de tiempo y espacio en que sucede esto; nuestro cerebro está generando una serie de eventos neuroquímicos en un área especifica, por lo que no sería entonces necesario consumir algunos chocolates u ostiones para que este proceso maravilloso de emociones y sensaciones sacuda nuestros cuerpos.

Muchas canciones que evocan al amor y a la felicidad como los poetas quieren hacernos creer que el amor es algo más allá de la comprensión “pero mi creencia es que nuestras emociones han evolucionado a partir de conductas y emociones que existen en el reino animal. “ No creo que el modo en que una madre ama a su bebé sea tan diferente del amor de una madre elefanta por su cría, de un chimpancé, o un macaco”.

En animales, se ha observado que una hormona llamada oxitocina participa para formar una conexión emocional entre una madre y sus crías. Y es muy probable que en las personas haya un proceso similar. “Es sólo que cuando experimentamos estas emociones son tan ricas que no podemos imaginar que sean sólo una serie de eventos químicos.” Esto puede estar sucediendo en el amor maternal, ¿pero será el amor romántico algo más que oxitocina?
Los científicos han hallado que la oxitocina participa en la formación de nexos entre ratones de pradera que, como los humanos, permite formar entre ellos relaciones monógamas que duran mucho tiempo. Y se han realizado estudios en seres humanos evidenciando que la oxitocina aumenta la confianza, la capacidad de leer las emociones de otros.

Es muy posible que el mismo tipo de molécula pueda participar afianzando los lazos entre individuos, en donde también participan otros químicos haciendo más intensos los lazos... se sabe que existen cientos de moléculas mensajeras en el cerebro: que actúan en diferentes áreas del cerebro. Vemos como si el amor es sólo una compleja reacción química, entonces la más poderosa emoción humana podría ser manipulada químicamente.

“La oxitocina aumenta la captación visual, aumenta nuestra capacidad de reconocer emociones en otros”, “Podría incluso mejorar nuestra capacidad de formar relaciones, y por tanto hay una posibilidad muy real de que algo como la oxitocina pueda usarse en conjunto con terapias matrimoniales para recuperar esa chispa”.

La oxitocina, es una hormona vinculada también al placer sexual y a la conexión entre personas, también parece ayudar a reconocer rostros familiares. Se sugiere que la hormona, de alguna forma, refuerza las redes cerebrales implicadas en la memoria social, y debe tener implicaciones para trastornos como el autismo.

Es por esta razón que al enamorarnos ocurren una serie de cambios bioquímicos y psicológicos en nuestro organismo. Conocido comúnmente como un "flechazo” porque todos sabemos que tenemos un complejo sistema de señales emocionales, que envía y recibe algún tipo de comunicación entre dos personas.

Cuando dos personas se conocen, se despierta un interés mutuo y se desata de súbito un mecanismo de seducción. Se manifiesta un lenguaje corporal, miradas y otras conductas. Se pueden observar también cambios en la piel, alteración del pulso, en los olores del cuerpo y cambios de actitudes en la forma de ser de cada uno.

Estas alteraciones fisiológicas se manifiestan cuando esa chica o chico es altamente atractiva(o). Es por esto que el conocimiento popular habla constantemente de la química del amor.

En sus momentos iniciales, el amor se manifiesta como una atracción que reúne una serie de características que tienen que ver con la bioquímica del organismo. Una sustancia en nuestro cerebro denominada feniletilamina que obliga la secreción de la dopamina o la norepinefrina, que por sus efectos se parecen a las "anfetaminas", las cuales producen un estado de euforia natural cuando estamos con esa persona que nos atrae.

EL AMOR ES DAR

El amor es la única experiencia real y duradera de la vida. Es lo contrario del miedo, es la esencia de la creatividad, la gracia del poder. Es la energía que nos conecta y vive en nuestro interior.
El amor es el único don de la vida que no perdemos nunca y es lo único que podemos dar de verdad. En este mundo de ilusiones y espejismos, el amor es la fuente de la verdad.

Sin embargo, nos resulta difícil amar a las personas simplemente por ellas mismas, pareciera que buscamos excusas para no amarlas.
Solo se encuentra paz y felicidad en el amor cuando nos olvidamos de poner condiciones. Generalmente imponemos las condiciones más duras a quienes “más amamos”. Y éstas son lastres con los que cargamos nuestras relaciones. Es necesario entender que el sentimiento que buscamos consiste en dar, no en recibir.

Si medimos el amor que recibimos nunca nos sentiremos amados sino estafados, el acto de medir no es un acto de amor.
Cuando no nos sentimos amados no es porque no recibimos amor, sino porque reprimimos el nuestro.

La reacción ante una discusión o conflicto nunca debería ser retener nuestro amor hasta que respondan a nuestras expectativas… podríamos esperar ¡para siempre! Si amamos (a pesar no nos guste lo que hagan) veremos desatarse el poder del universo y se nos abrirán los corazones con ternura.

Reciban un cordial saludo y muchas Felicidades a todas las parejas y enamorados en este mes de Febrero !!

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